miércoles, 14 de julio de 2010

ETAPA 10 O´CEBREIRO - PORTOMARIN

ETAPA 10 09/03/2010
Como bien he comentado en la narración de la etapa anterior, he dormido fatal en el albergue público de O´Cebreiro, durmiendo a ratos de media hora o con suerte de una hora de duración. A las 07:30 h de la mañana ya no aguantaba más, me he levantado y he empezado nuevamente el odioso ritual.

Debido al error que cometí el día anterior de no haber visitado el pueblo y la iglesia, me tengo que esperar hasta las 10:00 de la mañana para que pueda tener en mi credencial los sellos de la iglesia del alto del O´Cebreiro, unos preciosos sellos que tienen que estar en las credenciales de cualquier peregrino y yo los quería tener, así de paso compraba la credencial que han sacado con motivo del año Xacobeo.
Con una temperatura neutra, ni frió ni calor Je je O ºC a las 09:00 no me queda otro remedio que dar vueltas con la bici por los alrededores para entrar en calor e ir calentando puesto que todo este retraso lo voy a tener que recuperar a lo largo de día, sin tener aún claro que alternativa del camino voy a tomar.
Poco antes de las 10:00 pude contemplar el Grial, adquirir la nueva credencial y estampar los sellos en mi tercera credencial para, ya si, comenzar la ascensión al alto de San Roque y el alto del Poio, donde he coincidido almorzando con alguno de los peregrinos del albergue mientras nos comíamos unos buenos chorizos criollos.
Tras el almuerzo comienzo el descenso por la carretera tras varios intentos por el camino frustrados en primera instancia por placas de hielo que en dos ocasiones casi me tiran al suelo con un buen susto y en segunda instancia debido a la moda existente por esa zona de tener a los perros pastores dentro de las aldeas y granjas sueltos, tirándose como poseídos hacia la bici. Que decir que tengo perros y pase varios momentos de tensión, hechos que unido al retraso inicial acumulado, hacen que me decante por el descenso del puerto por carretera y .... joder que gozada de descenso. Más de 10 minutos de bajada entre 50 y 65 Km/h de velocidad sin dar a los pedales...era lo más parecido a ir con una moto.

Tal y como me recomendó Ignacio, que de esto del camino sabe una miaja, he optado por coger la variante de Samos una vez he llegado a Tricastela. Que decir que el paisaje precioso en todo el recorrido.

A las 11:55 he entrado en el Concello de Samos. Según el rutómetro, marcaba el perfíl que era todo llano. Pues nada más lejos de la realidad. Un camino puro rompepiernas donde las subidas y bajadas se entrelazan y con unos porcentajes, sin ser aragonés, de más del 10-15 % con barro y ríos de agua en el camino.

Hoy he visto cientos y cientos de vacas totalmente ajenas al paso del peregrino, claro esta acompañada de los perros, casi siempre pastores alemanes deseosos de comer las ruedas de mi bici por lo que, PIERNAS PARA QUE OS QUIERO, mientras le chillas al perro o te acuerdas en voz alta de su dueño para, en el mejor de los casos que te oiga y reclame a los animales.
Tras un rato entre sendas y pequeñas trialerillas entre castaños, se distingue en la parte de abajo del valle el monasterio de Samos. En algunos momentos, el lugar te transportaba a la isla de Madeira por su similitud en el verde, las formas, los helechos y el agua brotando por todos los lugares, hasta del suelo. el clima. Una vista preciosa y el monasterio es impresionante. Como los curas metían el agua del rió adentro del monasterio a través de los acueductos a distintos niveles y como las ocas van correteando y montando un ruido ensordecedor por los prados alrededor del Monasterio.
Anexionado al monasterio se encuentra el albergue que posee otro de los sellos más bonitos del camino. Es más bonito el sello del albergue que el del monasterio o el de la capilla del Ciprés, próxima al monasterio. Dadas las horas que se habían hecho, las 14:00 el monasterio ya estaba cerrado pero la chica del museo me dejo entrar al patio interior para hacer varias fotos, destacando la fuente que tienen en uno de los patios, con una altura superior a los 6 metros.

Desde Samos puse rumbo hacia Santiago, atravesando bosques de Castaños, explotaciones ganaderas, trialeras, sendas, con unos paisajes que invitan a poner pie en tierra, sentarte y quedarte contemplando esas vistas con calma y sosiego. Ya dirección Sarria, paro en un pequeño pueblo llamado Aguada para reponer fuerzas con un buen bocadillo de tortilla de atún y buen orujo casero.

El camino que transcurre entre Aguada y Sarria no tiene nada de bonito así que no voy a comentar nada. Nada más llegar a Sarria me dirijo a la oficina de turismo para recoger información de camino de Muxia y Fisterra así como sus correspondientes acreditaciones. Me quede sorprendido que la persona que me atendió no supiera nada acerca de estos dos certificados (que existen y los expiden en la oficina de turismo de Muxia y en el Albergue de Fisterra respectivamente) y que no tengan ningún rutómetro de estos trayectos. Si preguntáis por el camino que une Muxia con Fisterra preguntarlo en los Albergues de estos pueblos. Ellos conocen la ruta y te la explicaran (al estilo gallego claro esta).

Una vez fuera de la oficina de turismo, no se que he hecho que me he puesto a subir carretera arriba y cuando ha pasado media hora larga y sin ver flechas amarillas, he preguntado y me han dicho que estaba empezando a subir hacia O´Cebreiro de nuevo, que el camino era en dirección contraria. Así que a volver hasta Sarria (menos mal que la vuelta era para abajo). Cuando he localizado las flechas amarillas por las calles de Sarria, he entrado en un albergue para que me pusieran el sello y me respondió el tío seco que si no pasaba noche en el albergue no me ponía el sello, hecho que me obligo a dar media vuelta salir por donde había entrado y desearle que todo le fuera bien con un poco de gracia y un mucho de ironía.
Ya de nuevo en las calles de Sarria, en lo alto del pueblo te encuentras con la prisión preventiva, poco antes del convento de la Magdalena con su precioso mosaico a la entrada del convento donde me han puesto el ultimo sello de Sarria. Nada más pasas el convento, cruzas uno de los puentes más conocidos del camino que te conduce a través de una gran pendiente y unos árboles milenarios hacia las vías del tren.
Esta etapa, sobre todo el tramo final, es divertida porque te vas fijando en los mojones de piedra y como, cada vez van quedando menos kilómetros para el K100. Además este tramo es muy singular, no solo por la cantidad de pequeñas aldeas que cruzas y que te empiezan a enseñar la forma de vida de los que ahí residen sino también por la cantidad de riachuelos, ríos, orrios, minicapillas y otras construcciones que vas pasando y que en ocasiones te hacen echar el grito al cielo como a continuación narraré.

Como he comentado, a partir de este punto, hay hitos (mojones) cada kilómetro o medio kilómetro, que se te hacen eternos debido a que es puro rompepiernas. No solo subida y bajada sino también porque el camino se convierte en ríos donde los campos vierten el agua que ya no pueden retener, llegando en algunas ocasiones el agua a media altura entre el buje de la rueda y la cubierta de la rueda. Hay varios tramos que me toco portear la bici con alforjas incluidas por encima de las barderas de los campos limítrofes debido a la fuerza que la corriente del agua llevaba.

Del kilómetro 103 al 101 me he tirado más de media hora pues aquello no era camino, era un río en sentido contrario (imaginar que si el agua va en sentido contrario es que encima estás subiendo). Tan solo unas grandes piedras de granito en mitad del camino servían en ocasiones para poder apoyar el pie. En este punto he vuelto a entrar en un campo lleno de vacas porque la corriente no me dejaba avanzar, porteando esta vez la bici por una bardera de metro y medio de altura, con un golpe en los dientes de los platos, Que mal lo he pasado en este punto. Una de las siguientes fotos reflejan lo que os estoy narrando. Este tramo transcurre entre las aldeas de Lavandeira y poco antes de Morgade, donde es encuentra el K100. En la aldea llamado Couto se encuentra la fuente con el muñeco del Xacobeo.

Cerca de A Parrocha adelante a un grupo singular de peregrinos, más de 50 vacas. Pasar con la bici a 50 cm. de estos animales dándoles la espalda por un camino tan estrecho la verdad es que inquieta cuanto menos, pues, aunque sean mansas solo con la fuerza del rabo son capaces de tirarte de la bici. Ahh, casi se me olvida, a la altura de Fonfria casi me parto la crisma por culpa de un placa de hielo. La verdad es que me he visto en el suelo. Al final, no se como he podido dominar la bici (el golpe con la barra del cuadro ahí donde duele ese no te lo quitan) pero al final sin mayores consecuencias, solo los daños "COLAterales" que no me impidieron llegar alrededor de las 18:00 a Portomarin.

Cuando he llegado a Portomarin, me he envalentonao y he puesto rumbo hacia el albergue de Hospital, pero las primeras rampas y los 10 km. de ascensión tendida me han hecho desistir y volver a Portomarín.

Con el cansancio acumulado no he querido subir por la escalinata de Portomarín, tomando el camino directo hacia el albergue "El Mirador" donde he reservado plaza. El albergue me ha encantado. Esta muy bien y lo recomiendo a todo el que quiera ir. Tiene en el bar una terraza cubierta acristalada con vistas al embalse de Belesar (rio Miño). Nada más reservar, he dado con la bici una vuelta por el pueblo. que la verdad sea dicha es bonito.

Tras la ducha y subirme a la terraza para recopilar las impresiones de la etapa, mientras me despacho mi correspondiente pulpo a feira (de la feria del día además) con su Ribeiro, bajo a Internet para colgar alguna foto y cual es mi sorpresa que se ha metido más gente en mi misma habitación. Como eran las 20:30 pasadas y aún había una habitación libre, he recogido toda la paradeta y me he cambiado de habitación sin decir nada a nadie y menos mal, pues no os podéis imaginar como roncaban los colegas.

Hay que tener en cuenta la cantidad de cosas que un bicigrino trae consigo, más aún si va solo como es mi caso. Alforjas, sillín, saco dormir,

La única pega que le saque al albergue es que tienes que dejar la bici en la calle. Pero ante eso siempre puedes buscar la habitación que de al lado donde dejas la bici para tenerla controlada (es mi caso en los dias que la bici durmio al raso). El precio creo recordar que fueron 10 Euros, pero en días como este conviene dormir solo.
Tal y como recomende en etapas anteriores y siempre que se pueda, intentad dormir un día en albergue público y dos días en privado. Físicamente para recuperarte se nota y mucho. El poder dormir y tener espacio para las cosas es muy necesario en según que etapas. Esto y una pizca de picaresca os lo podreis montar de categoria.
Datos de la Etapa:
Km Etapa: 80,40 Km
Km camino: 857.98 Km
Vel media etapa: 14.55 Km/h
Velociada media camino: 14.5 Km/h
Vel Max: 63 Km/h
Tiempo etapa: 08:20:00
Tiempo pedaleo: 05:30:03
Tiempo acum camnio: 59:05:08
Pulsaciones Max/med: 155/114 ppm
Kilocalorias etapa: 2481 Kcal
Ascension acum: 1181 mts
Descenso acum: 2184 mts

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